Y llegó el día...

El día que no queria que llegara, pero que sabia que iba a llegar irremediablemente. Tampoco era tan terrible, es como el comienzo de clases,, sabes que va a llegar, y no es malo, solo que uno quiere prolongar las vacaciones y que tarde en llegar.
Sé que no es nada terrible, pero me puso de peor humor de lo que supuse. M no hizo nada de lo que yo hubiera querido que hiciera, como era de esperarse. Pero me senti tan mal, tenia ganas de gritar, de llorar y de irme a mi casa a dormir. Que fea sensación! Y pensar que tengo que ir todos los días.
Saludé a todos, y saludé a M, obvio, no le di charla, solo le hablé de trabajo, y tampoco me senté al lado de él. Que mal que me sentí!!!! Por Dios! Sé que en definitiva me afecta porque yo estoy mal. Angustiada, asi me sentí, y no traté de disimularlo.
Siguiendo con el tema M, él intentó iniciar charla en algun momento, y yo no lo seguí. Porque NO voy a hablarle como si nada hubiera pasado, como si siguieramos siendo amigos. No, no y no. Me niego, eso es lo que él quiere, pero yo me sentí muy mal en este ultimo tiempo, y siento que debo aclarar un monton de cosas si quiere que alguna vez le hable como antes. En un momento lo miré (mientras hablabamos de trabajo) y descubrí mirandome fijo. Pero intenté no mirarlo a los ojos, asi que duró un segundo. Cuando hablaba con otra persona, intervenia en las conversaciones, creo que ni me reí, y solo le contesté con monosilabos. No tenia ánimo para hacerme la simpatica. Asi yo no puedo.
Lo peor, ademas de saber que tengo que hacer algo con esta angustia que no me deja, es que en un momento, me dí cuenta que nada sería igual, ya no nos vamos a sentar juntos, ya no vamos a hablar como antes y eso me puso más triste. Pero en un rapto de optimismo, pensé que no será igual pero puede ser mejor. Será demasiado optimismo???